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Mafia
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En San Antonio de Prado, en Medellín, el domingo 10 de septiembre (2023), el narcotraficante número 82, Álvaro Uribe Vélez, reconoció públicamente que el dio la orden del crimen contra el pueblo realizado por el ejército y sus paramilitares contra los habitantes de la comuna 13, en lo conocido como “Operación Orión”.

En la comuna de 13 de Medellín se vivía un proceso organizativo popular que causaba temor en la mafia que detenta el poder en el país, proceso que fue combatido por diferentes medios y que ante su persistencia la agresión de la mafia fue subiendo de calibre. Intentaron directamente con los paramilitares y ante el fracaso de estos, enviaron al ejercito oficial, dirigido por paramilitares, como en una guerra de ocupación, a liquidar la organización popular.

La tenebrosa operación Orión llevada a cabo contra los habitantes de la comuna 13 de la ciudad de Medellín, 2002, en unidad estrecha con el paramilitarismo, arrojando cifras espeluznantes. "Tropas de la IV brigada del ejército, al mando del general Montoya y con el apoyo de estructuras paramilitares, atacaron a la población civil de esta zona urbana de la capital antioqueña, con el argumento de que había que desmantelar una red urbana de la guerrilla".

La corporación Jurídica Libertad, de la capital antioqueña reportó que: "Durante el operativo 80 civiles resultaron heridos, 17 homicidios fueron cometidos por la fuerza pública, 71 más por paramilitares, 12 personas fueron torturadas, 92 desaparecidas y 370 personas detenidas arbitrariamente".

La Corte Interamericana de Derechos Humanos, tímidamente, condenó a la mafia colombiana por las violaciones de derechos humanos cometidas en la Comuna 13 durante la Operación Orión.

En su sentencia, la Corte consideró que el Estado colombiano fue responsable por la ejecución extrajudicial de 10 personas, la desaparición forzada de 11 personas y la tortura de 5 personas.

La operación orión fue un delito contra la humanidad, donde el Estado junto a paramilitares mataron y desaparecieron decenas de civiles en la comuna XXIII d Medellín y aunque muchos sabíamos que este criminal dio la orden, y el que el mismo lo reconozca tiene una connotación importante para algún día, cuando en Colombia haya justicia se le condene.

Por ahora, también todos lo sabemos, no pasara nada ya que ellos, la mafia, controla la mal llamada “justicia colombiana”.